El avión de pasajeros de Austrian Airlines se vio afectado por el granizo
El avión de pasajeros de Austrian Airlines cayó bajo granizo y sufrió daños significativos durante el vuelo. El incidente ocurrió en un vuelo de Palma de Mallorca a Viena, la capital de Austria.
La aeronave cayó inesperadamente bajo granizo y tormenta eléctrica, que la tripulación no pudo detectar en el radar. Como resultado del fenómeno natural, las ventanas de la cabina de los pilotos fueron dañadas, así como la cubierta de la nariz de la aeronave.
Los pasajeros del vuelo señalaron que durante el vuelo se sintió una fuerte turbulencia, y los teléfonos y las tazas volaron por el interior del avión. Emmelie Oakley, una de las pasajeras, dijo: "Por supuesto, todos sentimos el granizo golpeando el avión. Durante un minuto, fue bastante fuerte y nos sacudió mucho de lado a lado. Estábamos muy asustados".
Según los datos preliminares, la tripulación del barco dio rápidamente una señal de socorro y recibió el permiso del controlador para aterrizar el avión, a pesar de los daños recibidos. Los pasajeros del vuelo no resultaron heridos.
Reacción de la aerolínea
Representantes de Austrian Airlines ya han iniciado una investigación interna sobre el incidente. La compañía aseguró que la seguridad de los pasajeros y la tripulación siempre es su prioridad, y analizarán cuidadosamente todas las circunstancias de lo sucedido para evitar casos similares en el futuro.
El incidente con el avión de Austrian Airlines subraya la importancia de predecir con precisión las condiciones climáticas para la aviación. Los frentes de tormenta y el granizo pueden ser difíciles de predecir, y las aerolíneas están trabajando constantemente para mejorar sus sistemas de monitoreo para garantizar la seguridad de los vuelos.
Seguridad en altura
A pesar de los graves daños a la aeronave, las acciones coordinadas de la tripulación y la rápida respuesta de los controladores permitieron evitar víctimas y lesiones entre los pasajeros. Este caso subraya una vez más la importancia de la profesionalidad de los pilotos y los servicios de tierra para garantizar la seguridad de los viajes aéreos.